El Real sitio de Aranjuez se encuentra a unos 20 Km. de la capital. Se trata no solo de un palacio, sino ademas de un basto conjunto de parques integrados en la ciudad que se desarrollo alrrededor de el. Sus orígenes se remontan al reinado de Felipe II. Este monarca fue quien lo mando levantar en 1561, y los planos definitivos se debieron a J.B. de Toledo (el arquitecto del Escorial).
Tras construir una parte del palacio, el proyecto fue abandonado hasta el reinado de Felipe V, el primer Borbón. Tras concluir el proyecto respetando los planes originales, a los pocos años el palacio sufrió un incendio. Fue entonces el hijo de este monarca, Fernando VI, quien encargaría su reconstrucción a S. Bonavia, el cual aunque respeto la estética, introdujo algunas modificaciones que hoy aún permanecen intactas.
La decoración exterior del palacio, a base de modestos ladrillos y piedra caliza, producen un contraste muy elegante. Las fachadas son bastante regulares y esta coronadas por una balaustrada. En cuerpo central de la fachada principal se eleva sobre el resto y esta decorado con un frontis que alberga el escudo real, coronando el conjunto con las estatuas de los tres reyes que intervinieron el el palacio. La última gran intervención en el palacio se acometió en tiempos de Carlos III. Este rey encargó a Sabatini que ampliara el palacio y para ello construyo dos nuevas alas en la fachada principal creando así un amplio patio de armas similar al del palacio real de Madrid. En una de estas alas se instaló la capilla, con frescos de F.Bayeu, mientras que en la otra se dispuso un gran salon de baile.
Continuando con los interiores destacan el salón del trono, decorado con terciopelo rojo. Próximo a el está el exuberante Gabinete de Porcelana, un prodigio de las artes decorativas. La totalidad de las paredes y techos, presenta una riquísima ornamentación de porcelana en relieve, mezcla de estilos rococó y chinesco. Fue realizada por Giuseppe Gricci (1763 - 65) por encargo de Carlos III y representa la obra cumbre de la Real Fabrica de Porcelanas de Buén Retiro, hoy desaparecida. Bonavia fue también el autor de la magnífica escalera de estilo imperial, con una hermosa balaustrada rococó en forja y dorado, y que es como un laberinto con múltiples rampas de acceso. Otras estancias a destacar son: el comedor de gala, el salón de baile, el dormitorio de la reina, el oratorio, cubierto de hermosos frescos.... En estas estancias intervinieron pintores de la talla de Amiconi, Bayeu, Giordano....
Una de las joyas del palacio son sus numerosos jardines (de la isla, del príncipe...), bañados por las tranquilas aguas del Tajo. En estas aguas navegaban las falúas reales, unas pequeñas embarcaciones exquisitamente decoradas, en las que se desplazaban el rey y la corte, mientras el famoso cantante castrado Farinelli les deleitaba con su arte. Precisamente fue Farinelli quien con su gusto y bondad, durante 25 años, se encargo de organizar estos espectáculos, además de orientar la decoración de los palacios españoles, y convertirse en la mano derecha de Felipe V y Fernando VI. De entre las falúas, destaca la de Felipe V, que fue un regalo de la Serenísima república de Venecia.
Destacar, dentro del parque, la Casita del labrador. Las obras se iniciaron en 1791 por orden de Carlos IV, y son el resultado de varios periodos constructivos. En su costrucción intervino Juan de Villanueva y Isidro González Velázquez (reinado de Carlos IV). Es un verdadero milagro que esta costruccion haya llegado intacta hasta nuestros dias, pues su estructura es realmente fragil por una insuficiente cimentación, y un mal anclaje entre los sucesivos aladidos, así como por la utlización de materiales de baja calidad en su decoración. De hecho, en varias ocasiones a peligrado la construcción, por lo que durante todo el s.XX ha dido sometida a importantes obras de restauración. Aún así la obra en conjunto es un verdadero tesoro de las artes decorativas en estilo imperio, que parece irreal por se quebradiza y efímera belleza. Su decoración interior se debe fundamentalmente a Dugourc. Entre sus salas destaca la escalera principal decorada con profusión de mármoles, el gabinete de plantino, encargada al decorador de Napoleón I, la sala corina, la sala de billar, la galería de las estatuas,etc.... .
Otro de los atractivos que nos ofrece el palacio, es la exposición de los trajes de novia de todas las mujeres de la Familia Real, como por ejemplo el de la reina Letizia o el de la reina Sofía. A ellos hay que añadir el manto de corte de las reinas de España, cuya última portadora fue la reina Victoria Eugenia. Otras exposiciones son por ejemplo las cunas de los infantes.
Aranjuez es realmente un mundo de ensueño, de maravillas, en en el que los placeres son la unica y verdadera razón de su razón de ser, y donde para disfrutar realmente tendremos que dejar volar la imaginación y dejarnos arrastrar por su sensualidad y su serena belleza.